Última hora Doñana

 

Doñana agoniza:

 

Lo que era su zona inundada permanente, y la más grande, la laguna de Santa Olalla, se ha secado completamente por segundo año consecutivo, ¡lo nunca visto!

Tal y como hemos alertado desde Greenpeace en numerosas ocasiones, estamos ante la crónica de la muerte anunciada de uno de los humedales más importantes del mundo. Al igual que ha sucedido en el Parque Nacional de la Tablas de Daimiel, en Ciudad Real, Doñana sigue la misma trayectoria hacia su desecación y desaparición.

Casi el 60% de las lagunas que existían en los años 80 en Doñana han desaparecido actualmente, según señala el último informe científico presentado por la Estación Biológica de Doñana – CSIC. Las sequías, cada vez más frecuentes y severas como consecuencia del cambio climático, sumado a la sobreexplotación de los recursos hídricos subterráneos, están haciendo desaparecer esta joya de la biodiversidad.

 


SALUD INTEGRAL


 

Desde que empezara el boom de la agricultura intensiva alrededor del espacio protegido de Doñana ―especialmente en el sector de los frutos rojos―, la superficie de regadíos no ha dejado de crecer en su entorno, muchos de ellos de forma ilegal. A pesar de las reiteradas denuncias, no se ha hecho nada y el Gobierno andaluz está a punto de legalizar 2.000 nuevas hectáreas de regadíos que no tienen derechos para usar el agua del acuífero.

Doñana sólo es la punta del iceberg de un problema que afecta a muchos otros lugares de España. Ya hemos visto degradarse espacios naturales de altísimo valor en todo el territorio antes que Doñana, pero desde Greenpeace seguiremos trabajando sin descanso para proteger la biodiversidad y revertir este desastre. Nos va la vida en ello. ¿Podemos contar contigo?

 

SÍ, QUIERO PROTEGER DOÑANA

 

Muchas gracias por tu compromiso, 

El equipo de Greenpeace