Ya son 36 militares de la UME los que realizan rastreos en la Comunidad de Madrid

Defensa quiere llegar a 150 en los próximos días

La ministra de Defensa, Margarita Robles, y el ministro de Sanidad, Salvador Illa, han visitado el Cuartel General de la Unidad Militar de Emergencias (UME) para conocer de primera mano la labor de rastreo que están realizando los militares para evitar la expansión de la COVID-19 en Madrid. Los ministros, que han sido recibidos por el teniente general jefe de la UME Luis Manuel Martínez Meijide, han asistido al punto de situación en la Sala Histórica del Cuartel General, donde se ha hecho balance de la Operación 'Balmis' y se han expuesto las líneas estratégicas de la Misión 'Baluarte'.

Tras pasar por el Centro de Operaciones Conjunto (JOC), han visitado una zona de exposición sobre las capacidades sanitarias de esta unidad, donde se han detenido en el Laboratorio de Identificación Rápida (LABIR). Éste es el laboratorio desplegable con mayores capacidades y precisión en la identificación de productos de España, y con la certificación ISO 9001. Es uno de los soportes más punteros de la UME en materia sanitaria y actualmente está destinado a analizar restos biológicos y a hacer sus propios PCR.

En la exposición también se ha mostrado un equipo de los utilizados por el grupo de Intervención de Emergencias Tecnológicas y de Medio Ambiente, varios vehículos dedicados a traslado de enfermos y fallecidos, un caño nebulizador y drones especializados, entre otros.

Los ministros han concluido la visita en la Unidad de Vigilancia Epidemiológica, espacio desde donde los rastreadores prestan su apoyo a la Comunidad de Madrid en el seguimiento de los posibles brotes. A día de hoy, 36 militares están colaborando con el gobierno regional, para llegar en los próximos días hasta 150.

En referencia a la Misión ´Baluarte´, la titular de Defensa ha destacado "los más de 2000 rastreadores ya formados", y que son ya "trece comunidades y las dos ciudades autónomas" los que han solicitado los apoyos de rastreadores militares. Esta colaboración con los distintos órganos regionales se está "realizando con eficacia", y de esta manera, la ministra Robles ha anunciado que "existe la posibilidad de realizar, por parte de la UME, una formación de rastreadores dentro de las comunidades autónomas, para que no sólo sean las Fuerzas Armadas, las que realicen rastreos".

Por su parte, el ministro Illa, ha destacado que esta ha sido una "visita de reconocimiento y agradecimiento a las Fuerzas Armadas, por su decisiva colaboración en la lucha contra la COVID-19", resaltando su "profesionalidad, metodología y altísimo nivel".

Ambos ministros han podido charlar con una representación del personal que está trabajando en estas tareas. Todos ellos, según han relatado, han recibido una formación específica para desarrollar este cometido, a la que suman su experiencia en las labores de rastreo interno entre los efectivos de la unidad durante la Operación 'Balmis' y han contado sus experiencias en los rastreos que están realizando.

La formación online que han recibido les ha permitido profundizar en la enfermedad desde diversas perspectivas. Así, han adquirido conocimientos sobre cuadros clínicos, periodos de incubación e infectivo, factores de riesgo, mecanismos de transmisión, medidas de prevención, procedimiento para el rastreo de contacto y principios de actuación, entre otros.

Durante la visita, los ministros han estado acompañados por el jefe de Estado Mayor de la Defensa, general del Aire Miguel Ángel Villarroya, la subsecretaria de Defensa, Mª Amparo Valcarce y el secretario general de Política de Defensa, almirante Juan Francisco Martínez.

La Unidad Militar de Emergencias, que se organiza en un Cuartel General, una Unidad de Cuartel General, un Batallón de Transmisiones, cinco Batallones de Intervención (BIEM,s) y un Regimiento de Apoyo e Intervención en Emergencias, ha participado, desde el año 2007 en un total de 567 intervenciones, trece de las cuales se han producido en el exterior, destacando la colaboración realizada tras el terremoto que asoló Haití en 2010 y los apoyos prestados en las campañas contraincendios de Grecia y Portugal durante 2018.


Fuente:
eltelescopiodigital.com