Degeneración Macular Asociada a la Edad, ¿es grave?
La DMAE es una enfermedad degenerativa que provoca problemas de visión y suele aparecer en mayores de 50 años, y especialmente a partir de los 75 años. No se puede prevenir, pero detectarla a tiempo puede mejorar el pronóstico
La Degeneración Macular Asociada a la Edad (DMAE) es la primera causa de pérdida de visión en mayores de 65 años. Esta enfermedad crónica se asocia al envejecimiento y a la genética, y no siempre presenta síntomas. Suele aparecer a partir de los 50 años y es la primera causa de pérdida de visión en mayores de 65 años. Según datos que maneja TK Home Solutions, la compañía líder en salvaescaleras para el hogar, en España afecta a más de 700.000 personas.
Realizar controles periódicos con el oftalmólogo a partir de los 50 años es clave para detectar el inicio de la enfermedad. De igual manera, llevar una vida sana no impedirá que aparezcan estos problemas oculares, pero puede ayudar a que la Degeneración Macular Asociada a la Edad avance más lentamente y la persona afectada tenga un mejor pronóstico clínico.
Qué es la Degeneración Macular
La Degeneración Macular Asociada a la Edad es una enfermedad ocular en la que se produce la degeneración de la mácula, que es una pequeña área localizada en el centro de la retina, encargada del 90% de la visión y de hacer que veamos los detalles nítidamente, tanto de cerca como de lejos.
La DMAE está asociada al envejecimiento, aunque muchas de las personas que la sufren también tienen una predisposición genética. Se calcula que tener un familiar de primer grado con esta enfermedad aumenta las posibilidades de padecerla entre 3 y 6 veces.
Además de los factores genéticos y asociados a la edad, las investigaciones han concluido que existen otros factores que aumentan el riesgo de padecer esta enfermedad, como los ambientales. Ser fumador, por ejemplo, se traduce en un riesgo 5 veces mayor de padecer Degeneración Macular Asociada a la Edad. Otros condicionantes que aumentan el riesgo son los siguientes:
- Llevar una alimentación rica en grasas.
- Tener colesterol o problemas circulatorios.
- Vida sedentaria.
- Sufrir hipertensión arterial.
- Presentar obesidad.
- Una exposición prolongada y continua al sol.
- Mayor incidencia en las mujeres y en la raza caucásica.
Síntomas de la DMAE
Muchas personas no son conscientes de que sufren Degeneración Macular Asociada a la Edad, ya que habitualmene esta enfermedad avanza muy lentamente, sin ofrecer grandes síntomas. De ahí que realizar revisiones periódicas sea tan importantes para realizar un diagnóstico a tiempo.
En general, los pacientes acuden al oftalmólogo cuando comienzan a tener la siguiente sintomatología:
1. Pérdida de la visión central
La persona que padece DMAE suele referir que los objetos aparecen distorsionados u opacos, como si se hubieran apagado los colores. En otras ocasiones ven como una mancha borrosa blanquecina en la visión central, que con el paso del tiempo va oscureciéndose y siendo más grande.
2. Las líneas rectas aparecen torcidas
Uno de los síntomas más claros de que se está sufriendo Degeneración Macular Asociada a la Edad es que las líneas rectas aparecen distorsionadas, torcidas o curvadas.
3. Visión borrosa
La persona puede detectar que no ve los objetos o las personas nítidamente, sino que presentan los bordes distorsionados. En ocasiones, esta percepción ocurre al realizar tareas como leer, coser o cocinar. También se presentan dificultades para ver las caras de las personas hasta que están situadas muy cerca.
4. Se necesita más luz
Otro síntoma que puede indicar la presencia de DMAE es que se necesita más luz para hacer las tareas cotidianas.
Ante cualquiera de estos síntomas, se recomienda consultar al oftalmólogo, especialmente si se tienen en la familia personas con DMAE. Hay que tener en cuenta que si esta enfermedad es tratada a tiempo pueden limitarse las secuelas irreversibles que provoca.
Tipos de Degeneración Macular
Los expertos de TK Home Solutions nos muestran los dos tipos de Degeneración Macular Asociada a la Edad que existen:
- DMAE Seca
La DMAE Seca, también conocida como Atrófica, es la que prevalece en ocho de cada diez casos. Su evolución es lenta, pero tiene la desventaja de que no existe tratamiento 100% efectivo, si bien se pueden encontrar formas para que, si afecta a un ojo, proteger al otro, y que se pueda aprovechar al máximo la visión que quede.
Este tipo de DMAE ocurre cuando los vasos sanguíneos existentes bajo la mácula se vuelven más frágiles. Esta enfermedad no suele ser incapacitante, y aunque las personas que la sufren suelen tener una pérdida de la visión central, lo habitual es que puedan ser autosuficientes y llevar una vida normalizada con la visión periférica, que no se ve afectada.
Los pacientes que sufren este tipo de DMAE se les suele recetar complejos antioxidantes y vitamínicos, con vitamina C, cinc y cobre. En cualquier caso, no conviene tomarlo por nuestra cuenta, solo si el médico lo recomienda.
No fumar, exponerse limitadamente a la luz solar, realizar ejercicio regularmente y llevar una dieta saludable rica en Omega 3 y antioxidantes también puede ayudar en estos casos.
- DMAE Húmeda
La DMAE Húmeda, también conocida como Exudativa, ocurre cuando bajo la mácula se forman vasos anómalos, que forman una malla vascular que deja escapar sangre y líquido. Es la menos frecuente y la que peor pronóstico tiene, pero existe tratamiento para frenarla. El 70% de las personas que se tratan no pierden la visión al año del tratamiento y cuatro de cada diez pueden conducir.
La evolución de la DMAE Húmeda causa una pérdida de visión más rápida y grave que la DMAE Seca. Este tipo de DMAE se suele tratar con inyecciones intravítreas y tratamiento láser con los que se consigue ralentizar o incluso detener la progresión de la enfermedad. Además, el oftalmólogo puede proponer una cirugía láser para destruir los vasos sanguíneos que han crecido de forma anormal o bien terapia fotodinámica.
Las inyecciones intravítreas, que es el tratamiento más frecuente, se ponen en salas blancas o quirófanos, con rigurosos controles de esterilidad. Es una práctica que no provoca dolor, ya que al paciente se le suministran gotas anestésicas. Después, deberá aplicarse colirio antibiótico con el fin de prevenir posibles infecciones.
Adaptar la casa para evitar accidentes
Una mala visión puede provocar accidentes en el hogar, según datos que maneja TK Home Solutions la principal causa de accidentes son las caídas (67 %) y el lugar donde son más graves son las escaleras. Por ello, sus expertos nos dan una serie de medidas para evitar caídas y golpes en casa:
1. Retirar alfombras y moquetas
La mejor manera para evitar tropezones es retirar las alfombras de la casa o fijarlas bien al suelo, un buen método es utilizar tiras antideslizantes debajo de ellas.
2. Mantener una buena iluminación en el hogar
Lo ideal es instalar luces nocturnas en el baño y pasillos. En el dormitorio es fundamental tener una lámpara en la mesilla al alcance de la mano para poder encenderla antes de levantarse. Otra solución es instalar interruptores luminosos. Pero, en ningún caso hay que desplazarse por la casa a oscuras.
3. Cuidado con los cables sueltos de aparatos eléctricos
Hay que prestar especial atención a que los cables de lámparas, teléfonos, ordenadores y cualquier otro aparato eléctrico no se encuentren en la zona de paso para evitar tropezar con ellos.
4. Ayudarse
En casos de problemas de visión, es mejor utilizar accesorios como un bastón o un andador. Y en las escaleras, lo mejor es instalar un salvaescaleras.
5. Objetos y adornos
Los muebles bajos, adornos o cosas dejadas provisionalmente si no se ven bien pueden estorban el paso y dificultan el movimiento por la casa, especialmente en los pasillos. Además, es conveniente no colocar las cosas ni muy altas ni muy bajas, es preferible que todo esté al alcance de la mano. Y fundamental mantener la casa recogida.
6. Precaución con las escaleras
Las escaleras pueden ser especialmente peligrosas en muchos casos si se tiene una mala visión. Por lo que, las sillas salvaescaleras puede ser una gran solución que proporciona independencia y, sobre todo, seguridad.
Leandro Palomo, responsable de Salud y Seguridad de TK Home Solutions comenta: “la Degeneración Macular Asociada a la Edad es poco común antes de los 55 años y, en cambio, se da con cierta frecuencia en mayores de 75 años. Algo tan sencillo como, llevar una vida sana y mantener una alimentación saludable es fundamental para retardar la pérdida de visión relacionada con la DMAE y tener una mayor calidad de vida. Y ante una pérdida de visión, contar con un salvaescaleras de TK Home Solutions puede ayudar a no tener accidentes”.